Peter Jackson prepara un remake de El Señor de los Anillos

A pesar de que los films originales se estrenaron hace menos de una década, Jackson afirma que es capaz de innovar y mejorarlas.

26 de noviembre de 2013. Marquen esa fecha en sus calendarios, porque es la elegida por Peter Jackson para el estreno de La Comunidad del Anillo, remake de la película homónima que se estrenó en 2001, basada a su vez en la obra de J.R.R. Tolkien, famoso autor de origen checo.

"Estoy dispuesto a vencer y convencer", afirma un Jackson seguro de sí mismo tras la liposucción a la que fue sometido en una clínica de Los Ángeles. "Quiero que El Señor de los Anillos vuelva a ser la obra de crítica social que fue ideada por Tolkien, pero adaptada a nuestros tiempos", nos cuenta el cineasta mientras alquila una limusina en Beverly Hills.

Algunos de los actores originales ya han confirmado su aparición en la nueva saga, como Sean Bean, que nos relata en exclusiva las motivaciones de su personaje: "Boromir es ahora un alto cargo de una multinacional, un enchufado que debe demostrar su valía y evitar caer en la tentación de las drogas de diseño. Todo parece ir bien hasta que regresa el máximo accionista de la compañía, Aragorn. Como Boromir no quiere renunciar a sus dietas, se ve obligado a falsificar su currículum... y hasta aquí puedo contar", dice levantando una ceja enigmáticamente. "Pero ya aviso que la relación con Aragorn alcanzará cotas jamás vistas con anterioridad. Iremos más allá que en la saga original con Frodo y Sam".

Una de las bajas más destacadas es la de John Rhys-Davies, que ya no hará de Gimli. "En esta versión no tienen cabida las razas no humanas, así que el enano se queda fuera". En su lugar participará Christian Bale, que con su hacha y su carisma peculiar interpretará a Jim Lee, "el típico yuppie: por la mañana, pasa un largo tiempo dedicándose al meticuloso cuidado y puesta en forma de su cuerpo. En la empresa no se sabe exactamente qué hace, ni si hace algo, dedicado como está básicamente a concertar citas por teléfono, intentar reservar mesa en el restaurante más exclusivo de la ciudad o aconsejarle a su secretaria qué ropa tiene que ponerse para estar más sexy. Su vida no parece excitarle demasiado hasta que descubre su gusto por la sangre. Así que por la noche mi personaje se convierte en un asesino en serie, aunque me alejo de los cánones marcados por Dexter".

Como Jackson tampoco quería a gente de más de 70 años en el plató, "por lo que pudiera pasar", se ha

reemplazado a Ian McKellen por Mel Gibson para el papel de Gandalf: "Mi personaje es una mezcla de mago, guerrero y banquero sionista. A pesar de que se aleja mucho de mi forma de ser, espero que esta interpretación me redima ante la comunidad judía", nos comenta un circunspecto Gibson. 

Otro de los que ya han firmado para un papel es Gerard Butler, que hará de Frodo Bolsón. "Buscaban a un Frodo más masculino, más violento, más motherfucker... y me eligieron a mí", comenta Butler con su peculiar acento alemán. "Pero creo que mi misión no será arrojar un anillo a un volcán, sino defender una multinacional de los ataques de la Comisión de Valores, o algo así. Pero seguirá habiendo un anillo, y también un objeto místico como la lanza de Longinus o la bandeja que llevó la cabeza de San Juan Bautista, y los tendré que proteger con mi vida".

La nueva saga, que todavía no ha comenzado a rodarse, ya es candidata a 6 Óscars, entre ellos por Vestuario y Maquillaje.

Fuente: Lint