Me parece fatal lo que dijo el otro día la Presidenta de la Comunidad de Madrid. En mi humilde opinión, no son maneras de tratar a nadie.
Esta señora condesa, que presume de ser tan liberal, emplea expresiones vulgares como cualquiera de nosotros. Yo pensaba que teniendo un currículum tan excelente, y siendo funcionaria desde 1976 (el año en que Rocky se llevó dos Oscar), tendría más diplomacia, y sabría comportarse mejor. Pero no, Esperanza Aguirre apela a sus instintos más barriobajeros y llama HDP a un pobre hombre, un consejero de no sé qué. Lo de pobre es un decir, porque es posible que cobre en un mes lo mismo que yo en un año.
Creo que habría que suspenderla de sueldo durante un tiempo para que aprendiese. Con salir pidiendo disculpas no vale, que para algo tiene un cargo público remunerado. Ojalá todos los políticos hicieran su trabajo sin cobrar. Otro gallo nos cantaría. O no, porque entonces estarían todos untados. Qué asco de política y qué asco de gente.
Señora Aguirre, ha perdido un fan. Yo pensaba votarla el día que se presentase a las elecciones generales, pero sus malos modales me demuestran que sería una pésima dirigente. ¿Verdad que yo no la he insultado aunque podría haberlo hecho? No pienso dedicarla ni un sólo epíteto. Ni zorra, ni capulla, ni lerda, ni antipática, ni nada. Pero que le quede claro que ya no me creo que fuera inocente con aquello de los terrenos del AVE. Ni me creo que sepa quién es José Saramago. A partir de ahora votaré a Gallardón, que me cae mejor. Hala.
Isaac Pérez (Madrid)
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