Va a donar sangre y no tiene

En la unidad móvil de donación de sangre, no daban crédito. Al pincharle no sangraba.

Justo Carrión de 43 años, donante universal y habitual, no tiene sangre en las venas, ni siquiera de horchata. Tras un sangrante divorcio, la pérdida de su puesto de trabajo y una derrama en su comunidad de vecinos, se ha quedado en números rojos y sin hematíes, leucocitos, plaquetas ni plasma sanguíneo.

“Es un caso digno de un profundo estudio”, comenta el prestigioso hematólogo, Rodríguez-Vázquez y Pérez. “No hay precedentes conocidos en toda la historia de la humanidad. Justo es lo que popularmente se conoce como un zombie”.

Su exmujer, Helena Manzano, discrepa: “Para nada. Él siempre ha sido así. Mi madre ya me lo decía: Hija tu marido es un sin sangre. Y, mira, tenía razón”. Justo, por su parte, se defiende con una pasmosa sangre fría: “Eso no es cierto. La culpa es de ella. Con el divorcio no sólo se ha quedado con todo, sino que me ha chupado hasta la última gota de sangre”. Cuando le pedimos más detalles sobre las causas que le han llevado a esta situación, Justo se cuadra: “No hablare más para no hacerme mala sangre. Pero Helena es mala, muy mala. Como su madre. Lo lleva en la sangre.”

Sin duda alguna, los procesos de divorcio son un chupa-sangres para la mayoría de los cónyuges masculinos, muchos de los cuales acaban sudando sangre. Pero en cualquier caso, la lógica aconseja no hacer sangre en un tema en el que fácilmente se le sube a la gente la sangre a la cabeza. Todos los especialistas coinciden al apuntar que antes de convertir las disputas maritales en un campo de batalla y no entrar a sangre y fuego en una asunto tan espinoso, hay que retirarse elegantemente a la primera sangre.

El psicólogo matrimonial, Juan Pablo de la Iglesia, declara: “En mi consulta lo veo mucho. Parejas que se quieren chupar la sangre el uno al otro, sólo por venganza. Y pensar que cuando se casaron se hubieran dado la sangre”.

La clase médica, en reunión plenaria, estudia el método más efectivo para que a Justo le vuelva la sangre al cuerpo, todavía sin éxito. La buena noticia es que Justo es un tipo positivo, en concreto O+. 

Fuente: Farming News