El Papa quiere una Mama

El bávaro Joseph Alois Ratzinger, también conocido en ciertos círculos como Papa Benedicto XVI, ha declarado que está hasta la sotana de celibato, que él lo que quiere es una Mama.


La idea le vino en su reciente visita al Reino Unido. Huyendo de una manifestación de bárbaros partidarios de los matrimonios homosexuales, el sumo pontífice no tuvo más remedio que esconderse en una iglesia anglicana. Ahí descubrió al padre Elmore Sutton, párroco local, con los brazos en cruz y los ojos cerrados, mientras su esposa metía su santa mano por debajo de la estola morada.

"¡Santos Carámbanos!", exclamó el Papa, "la Wikipedia Vaticana tenía razón. El clero anglicano es libre desde el siglo XVI, para contraer matrimonio, mantenerse célibe o vivir en soltería". Al Papa se le iluminó la cara y, por primera vez en su vida, experimentó un atisbo de propósito vital.

Acto seguido, convencido por un taxista del Punjab, el Papa se fue corriendo a un cibercafé (propiedad del primo del taxista) para darse de alta en meetic.com. Aunque tuvo que mentir respecto a su residencia, ya que en el formulario de inscripción no aparecía como país El Vaticano, Ratzinger logró inscribirse como ThePopeRocks y empezó a buscar un buen partido.

Todavía no se sabe quién ha sido la afortunada elegida para esposarse con Su Santidad, pero en Facebook se rumorea que se trata de Josefina, una viuda de muy bien ver que vive con sus tres gatos en un pisito del barrio de Sagrada Familia de Barcelona. El próximo fin de semana, en la visita de Benedicto XVI a Barcelona, se producirá el encuentro. El hijo de Josefina, Josep María, que resulta que es el secretario personal del alcalde, ha convencido a Hereu para que corte la circulación de coches, autobuses y bicicletas en toda la zona para que la parejita pueda hacer un romántico paseo nocturno por el barrio. ¡Deseémosle todos mucha suerte!


Fuente: Ernesto Paniagua